sábado, 7 de abril de 2018

LOCO PREVENIDO VALE POR DOS


Le conté que me costaba conciliar el sueño. Que ciertos personajes históricos poblaban mi mente, aunque ninguno coincidía con la cronología histórica aprendida. Veía, como en una nebulosa, a Calígula charlando con Sócrates a cerca de los beneficios de la cicuta, a Hitler, en cómoda poltrona, leyendo al Mahatma Gandhi o a Borges y Guy de Maupasant contándose cuentos y hablando de política...,
-Cosas absurdas para la vida real pero no para un sueño -me dijo-; pero hubo algo que pareció no encajar en mi relato: Fue cuando le conté que, con mucha frecuencia, me veía  yo mismo  charlando con Freud sobre su teoría del inconsciente.
Entonces se levantó y, con cierta complacencia, me invitó a tomar asiento en su propia silla mientras él se recostaba en el diván. Luego, empezó a contarme de sus fantasías sexuales. Me dijo que se  llamaba Jack.

De hecho, nunca más volví.

No hay comentarios:

Publicar un comentario